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Al gobernador Enrique Alfaro Ramirez le asiente completamente la razón al exigir recursos a a la Federación para que se siga adelante con el proyecto del rescate del Río Santiago y se edifique la presa El Purgatorio, ya que dicho programa y obra de infraestructura necesarias sólo se pueden lograr exitosamente con la articulación del esfuerzo coordinado de los dos ámbitos de gobierno, más lo que habría que revisar es la forma en que se está gestionando este dinero frente al gobierno federal; analizar si es con los planteamientos, proyectos y sustento correctos como se está realizando la procuración de los recursos provenientes del presupuesto a cargo del Poder Ejecutivo Federal y si están haciendo el trabajo adecuado los legisladores federales por Jalisco emanados de los diversos partidos políticos a efecto de lograr ésos y otros recursos más del erario a ejercer por la administración pública federal que encabeza el Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tal vez sería más importante que realizar manifestaciones estériles hacer una tarea de cabildeo superior y buscar que el el Presidente López Obrador conozca la información más completa sobre los alcances de dichos proyectos y generar se sensibilice de la oportunidad e importancia que ellos tienen para el desarrollo integral y la cohesión social, y que los aprecie más allá de filias, fobias, discriminación o del afán por no respaldar proyectos planteados por el gobernante emergido de un partido distinto al que lo postuló y del cual es líder el Presidente de la República.
Es importante que los jaliscienses respaldemos al Ejecutivo Estatal, pero también es fundamental que el Ejecutivo de Jalisco revise cuál es la mejor forma de acometer la gestión de estos recursos. Ya lo hemos dicho y lo reiteramos, no es la República de Jalisco, no es una entidad autónoma, no puede parecerse a una entidad como Cataluña o similar en otros lares del planeta, pero tampoco está bien que el Gobierno de la República no analice adecuadamente prioridades.
En los temas que tienen que ver con otros asuntos de desarrollo, es importante que Jalisco acelere el paso para cumplir la línea tres del tren ligero. Hay que examinar otros proyectos como puede ser el tranvía de Tesistán a Periférico en su cruce con Laureles, un proyecto que dejó terminado y pagado el alcalde de Zapopan Hector Vielma, y que hoy podría revisarse como algo oportuno para unir la línea tres del tren ligero en la estación Laureles y periférico con la población de Tesistán, y adicionarla con un par de corredores de transporte articulado por la carretera Guadalajara-Colotlán y por el otro lado desde Tesistán hacia Santa Lucía y Nextipac hasta la Venta del Astillero para conectar con la carretera que va a Puerto Vallarta y a la zona norte del país.
Se requieren aproximadamente 7 mil 500 millones de pesos para invertirse a fin de concluir la presa El Purgatorio, la planta potabilizadora, el acueducto, los tanques reguladores y el acuífero sur; el tiempo para terminarla sería entre 2 y 3 años en función del flujo de recursos.
No está de más recordar cómo se visualizaron esos proyectos acuíferos que hoy son motivo de discordia entre los gobiernos Estatal y federal. El 16 de junio de 1991 se inaugura la primera etapa del proyecto “La Zurda Calderón”, consistente en la presa Elias González Chavez, construida en el municipio de Zapotlanejo, muy cerca del límite con Acatic en el Río Calderon, un afluente del Santiago y la planta potabilizadora San Gaspar. En ese año se inicia la presa de El Salto en Valle de Guadalupe que se concluye dos años después y forma parte de la segunda etapa del proyecto que consideraba la construcción de la presa derivadora de El Purgatorio, misma que en este momento está en proceso. La tercera etapa era la construcción de la presa La Zurda, la primera etapa proporcionó mil 500 litros por segundo, la presa de El Purgatorio está un kilómetro antes que la desembocadura del Río Verde al Río Santiago en territorio de los municipios de Guadalajara, Zapotlanejo e Ixtlahuacán del Río.
La presa de La Zurda estaba prevista en unos terrenos denominados Los Sandovales en el mismo municipio de Cañadas de Obregón, en el que finalmente se está edificando la presa de El Zapotillo. El proyecto de La Zurda Calderón no contemplaba enviarle agua a Guanajuato, el proyecto fundamentalmente fue para dotar de agua potable a Guadalajara y en ningún momento se previó entregarle una gota de agua a Guanajuato. Fue el presidente Vicente Fox y el gobernador Alberto Cárdenas Jimenez quienes signaron el leonino convenio para entregarle agua de Jalisco a Guanajuato, mismo que exigimos desaparezca.
El cambio del proyecto de la construcción de la presa de La Zurda a la presa de El Purgatorio tuvo otro ingrediente; en la construcción de la presa de La Zurda no se consideraba la inundación de los poblados de Temacapulin, Acasico y Palmarejo. Otro detalle importante es que al mismo tiempo que empezó el proyecto de La Zurda Calderón, siendo gobernador Guillermo Cosío Vidaurri y presidente Carlos Salinas de Gortari, se inició la construcción del proyecto llamado El Cuchillo en Nuevo León, que al igual que La Zurda Calderón era un proyecto conformando por un conjunto de cuatro embalses y las presas derivadoras y las plantas potabilizadoras correspondientes, pero que a diferencia del nuestro aquel sí se realizó.
En jalisco no se culminó este gran proyecto dado que a partir del año 1992 que pidió licencia el gobernador Cosío Vidaurri, ya no hubo la suficiente fuerza en los gobiernos subsecuentes para desahogar con una gestión adecuada las tareas de consolidación de este proyecto o alguno similar. Para concluir la presa El Purgatorio, la planta potabilizadora, el acueducto, los tanques reguladores y el acuífero sur se requieren 7 mil 500 millones de pesos y el tiempo estimado para terminarla sería entre 2 y 3 años en función del flujo de recursos.
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