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A pesar de que se está en los días más críticos de contagios del Coronavirus, la reactivación económica no puede esperar más en Jalisco y aún cuando por momentos la desesperación por el confinamiento y la necesidad de salir a trabajar ha llevado a mucha gente a romper el encierro, es evidente que el Gobierno está otorgando a los ciudadanos un alto grado de responsabilidad al confiar en que acatará todas las disposiciones impuestas en cuanto a medidas sanitarias y se comportará a la altura a fin de gozar del beneficio de abrir sus negocios e ir paulatinamente saliendo a la nueva normalidad. De manera que si otra cosa no sucede, Jalisco pondrá en marcha este lunes su plan de reactivación económica siguiendo únicamente su propio semáforo de indicadores con la medición de ritmo de contagios, capacidad hospitalaria y movilidad intraurbana e Inter regional, los cuales se encuentran en verde para iniciar actividades económicas.
Y decimos “si otra cosa no sucede” porque en las últimas horas se ha dado a conocer una recomendación de la Mesa de Salud, a través de la cual funcionarios como el Secretario de Salud, Fernando Petersen Aranguren y la coordinadora del Gabinete Social, Ana Barbara Casillas, le están solicitando el gobernador Enrique Alfaro Ramirez, recorrer el inicio de la anunciada reactivación económica gradual al 15 de junio.
Casillas pide que se amplíe 15 días más la Fase 0, que se cierren los giros de recreación como alitas y bares y que los giros de servicios también sean reconsiderados.
En tanto la Universidad de Guadalajara solicita al gobernador que apriete las medidas de precaución y suba los parámetros de medición del Covid-19.
Para contestar dichas solicitudes, el gobernador se tomará su tiempo y será hasta mañana sábado cuando fije postura, por lo que habrá que estar atentos a lo que podría implicar un cambio de planes obligado seguramente por el relajamiento en las medidas que se ha dejado observar en los últimos días por parte de ciudadanos que han aprovechado para acudir a bares, alitas y micheladas.
El hecho es que se atraviesa un momento ascendente en la curva de contagios, y ello ha obligado que los protocolos sanitarios en los negocios sean aún más estrictos para permitir su apertura, pero si bien el gobernador ha dicho que no se pueden mantener más tiempo cerrados, no se descarta un vuelco de timón.
Alfaro Ramirez, también ha expresado que “No podemos resistir más tiempo con la economía como está, vamos a tener que enseñarnos a convivir con el riesgo y la necesidad de generar condiciones para que la economía se reactive».
De tal suerte que habrá que esperar a mañana para conocer la determinación del Ejecutivo que sin duda tendrá que colocar sobre la balanza asuntos de gran peso; básicamente las implicaciones que tendría retrasar la puesta en marcha de la activación con respecto a la salud y la economía de millones de jaliscienses.
Si Alfaro se mantiene firme para proseguir con lo ya establecido, a partir del próximo lunes, los negocios que hayan cumplido las medidas impuestas por las autoridades sanitarias y cuenten con la calcomanía que así lo valida (la original, no la pirata que ya circula en el mercado negro), podrán estar en condiciones de abrir sus negocios y establecimientos que se ubican entre el primer grupo de autorizados.
Otro tema que va de la mano con este asunto de la reactivación es lo que se refiere al polémico endeudamiento aprobado por el Congreso del Estado al Ejecutivo que asciende a 6 mil 200 millones de pesos.
Habrá que recordar que con dicha suma, según se ha informado por parte de la Mesa de Reactivación Económica del Estado, que integran representantes de diversos sectores, se pretende cubrir el boquete presupuestal que tiene el gobierno de Jalisco por los gastos que ha generado la emergencia sanitaria de COVID-19, es decir, 5,080 millones de pesos: tres mil millones de gastos generados en salud para atender la pandemia; mil 260 millones por la caída de ingresos estatales y 820 millones por la disminución de recursos federales.
Y si bien al momento no se ha contratado ningún crédito por tal cantidad, se hace necesario se maneje con absoluta transparencia y claridad. Lo menos que se puede hacer es exigir que pronto haya una información más amplia en cuanto al uso que se dará al recurso por más que esté bien justificado.
Vigilar un adecuado manejo de forma abierta a los ojos de la ciudadanía para evitar suspicacias o malas interpretaciones y ver que realmente se impulse obra pública en materia, hospitalaria, educativa e infraestructura por medio de la generación de empleos y ayude a reactivar la economía.
Aquí habrá que dar un voto de confianza. En tanto, corresponderá a los sectores productivos en la industria, comercio y servicios que estarán activándose así como a la sociedad en general apoyar acatando en la forma más acuciosa posible las medidas de contención sanitaria para evitar retrocesos indeseados, y a cambio se pueda avanzar adecuadamente hacia las próximas fases del programa de reanimación socioeconómica.
Los llamados de la Universidad de Guadalajara y de los integrantes de la Mesa de Salud al gobernador tanto para extremar medidas como para que amplíe la Fase Cero al 15 de junio hacen evidente que existe el temor de que puedan ocurrir mayor número de contagios en los próximos días, obligando quizá a volver a las temidas fases de contracción productiva, distanciamiento y aislamiento comunitario. Pero tendremos que esperar a mañana para conocer de propia voz del gobernador qué pesó más sobre la balanza.
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@salvadorcosio1
