Hugo Sánchez Márquez es uno de los futbolistas más icónicos en la historia de México y del fútbol mundial. Nacido en 1958, en la Ciudad de México, destacó como delantero por su capacidad goleadora y su impresionante técnica.
Su carrera estuvo marcada por múltiples títulos y logros, tanto en clubes como a nivel individual. En su paso por el Real Madrid, ganó cinco ligas consecutivas (de 1986 a 1990), una Copa del Rey en 1989 y varias Supercopas de España. En México, fue campeón con los Pumas de la UNAM en 1981, antes de su salto a Europa, consolidándose como un referente del balompié internacional.
Uno de los mayores logros de Hugo Sánchez fue ser cinco veces ganador del Trofeo Pichichi, otorgado al máximo goleador de la liga española. Cuatro de estos títulos los consiguió de manera consecutiva entre 1985 y 1988, y el quinto en 1990. A lo largo de su carrera en Europa, anotó más de 200 goles, siendo 234 en total con el Real Madrid, convirtiéndolo en uno de los máximos anotadores en la historia del club.
A nivel general, sumó más de 400 goles en su carrera, consolidándose como uno de los mejores delanteros de su tiempo.
Sánchez también dejó huella por su espectacularidad en el campo. Se caracterizó por anotar goles acrobáticos, especialmente de chilena, uno de sus sellos distintivos.
Uno de sus goles más recordados fue en un partido contra el Logroñés en 1988, donde realizó una chilena perfecta que se convirtió en un emblema de su estilo. Otro tanto histórico fue el que le anotó al Oviedo, con un remate de volea impresionante, el cual quedó inmortalizado en las videotecas del fútbol mundial.
Como entrenador, Hugo Sánchez tuvo momentos destacados y otros complicados. Dirigió a los Pumas de la UNAM, donde logró un histórico bicampeonato en 2004, siendo el primer equipo en conseguirlo en la era de torneos cortos en México.
También fue seleccionador nacional de México, pero no alcanzó el éxito esperado, quedándose en la semifinal de la Copa Oro 2007 y no logrando clasificar a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008. A pesar de estos altibajos, Sánchez siempre ha sido una figura respetada y admirada en el fútbol.
Un dato curioso y desafortunado sobre la carrera de Hugo Sánchez fue el racismo que enfrentó en España. Desde las gradas, algunos aficionados le gritaban «indio» y le pedían que regresara a México, en referencia a su origen latinoamericano.
A pesar de estos insultos, Sánchez respondió en el campo con goles y espectáculo, ganándose el respeto y admiración de todo el fútbol español, transformando esos ataques en motivación para seguir rompiendo récords y consolidarse como una leyenda del deporte.