SAO PAULO (Xinhua) — Al menos 33 personas todavía se encuentran desaparecidas y 179 murieron a causa de la catástrofe climática con inundaciones, crecida de ríos y deslaves que afectaron al 90 por ciento del estado de Río Grande do Sul, en la región sur de Brasil, informó la Defensa Civil.
De acuerdo con el último balance de la dependencia, el fenómeno inédito iniciado el 29 de abril pasado afectó a poco más de 2,39 millones de personas en 478 municipios, entre ellos la capital del estado, Porto Alegre, y en el momento más crítico más de 450.000 personas llegaron a estar evacuadas.
Aunque las inundaciones comenzaron a disminuir desde mediados de junio anterior, las tareas de rescate y reconstrucción aún continúan y tienen a los sistemas de desagüe urbanos en el centro de la atención, sobre todo en Porto Alegre, que el pasado fin de semana se volvió a inundar tras la crecida del río Guaíba.
El Gobierno de Brasil ha destinado 85.700 millones de reales (unos 15.000 millones de dólares) a la emergencia y reconstrucción de Río Grande do Sul, según informó hace unos días el ministro extraordinario de Apoyo a la Reconstrucción del estado, Paulo Pimenta, designado por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en forma temporal para enfrentar la emergencia.
Río Grande do Sul, estado agrícola y ganadero por excelencia ubicado en la frontera con Argentina y Uruguay, fue el escenario del rescate de más de 89.000 personas y 15.000 animales con la movilización de más de 30.000 elementos de las Fuerzas Armadas y cuerpos de seguridad, así como personal del estado, municipios, voluntarios y ciudadanos.