El Peribús, el proyecto que el ex gobernador Aristóteles Sandoval no pudo realizar, prácticamente fue desarrollado y concluido en el gobierno de Enrique Alfaro, aunque bautizado ahora como Mi Macro Periférico.
Sólo que para ser un gobierno “ciudadano” distinto, como ha sido su estandarte, Alfaro repitió la misma fórmula de pasadas administraciones: ignorar a Tonalá, el municipio con mayor marginación de la zona metropolitana.
Con algunos ajustes, el nuevo transporte masivo, responde al mismo modelo elaborado en la administración de Aristóteles Sandoval.
El actual gobierno tuvo conocimiento de dichos planes, pero no corrigió la grave omisión que solamente fabricaba una “herradura” sobre el periférico y dejaba al margen a Tonalá.
Y es que sólo una vez el proyecto del entonces Peribús (hoy Mi Macro Periférico), consideró recorrer todo el anillo periférico existente con destino final el centro de Tonalá.
Fue en 2013, en el primer año de la administración de Aristóteles Sandoval, cuando se anunció este sistema de transporte masivo que partiría de la carretera a Chapala hasta la cabecera municipal tonalteca, en un recorrido de 70 kilómetros.
Para 2015 se contaba con un estudio que incluía 97 estaciones, con 182 autobuses de 12 metros de longitud que recorrería el periférico en carriles preferenciales centrales o laterales, sin necesidad de una ruta confinada.
Se suponía que el Peribús movilizaría 370 mil pasajeros diarios en una operación conjunta entre Siteur (Sistema de Tren Eléctrico Urbano) y la Alianza de Camioneros de Jalisco. Sin embargo, debido a lo complejo del proyecto y la falta de recursos, un año después, todo cambió.
El 27 de octubre de 2016, fue presentado el documento “Análisis Costo Beneficio del Proyecto de Transporte Masivo Sistema Integrado Peribús Primera Etapa”, por parte del Instituto de Movilidad y Transporte del Estado, mismo que planteaba un recorrido de 41.5 kilómetros (28.5 menos que el primero) y con un trazo de carretera a Chapala a Artesanos, cerca de Belisario Domínguez, recortando el tramo que llegaba al centro de Tonalá.
El estudio, de 874 páginas, incluía 46 estaciones, once líneas alimentadoras y no consideraba la implantación de toda la circunferencia del periférico “por restricciones presupuestales” y aclaraba que la zona oriente, sería atendida por unidades alimentadoras.
Mi Macro Periférico tiene 42 estaciones, de carretera a Chapala a Barranca de Huentitán, junto a Belisario Domínguez (el mismo trazo del proyecto del Peribús) y también utilizará rutas complementarias y alimentadoras.
En una gira por Tonalá en compañía del alcalde Sergio Chávez, el gobernador informó que gestionaría los recursos ante el gobierno federal para construir seis estaciones e incluir a la cuna alfarera.
El propio presidente municipal las enumeró a lo largo de seis kilómetros: Cerro de la Reina, Juárez y Periférico para darle servicio a Rancho de la Cruz, Coyula, la cuarta en Avenida Matatlán, la quinta en San Gaspar de las Flores y la última sería en la colonia Jalisco.
Esto quiere decir, que siempre fue posible construir las estaciones en ese municipio y no por las razones técnicas expuestas.
Por cierto, el Peribús, el proyecto de Aristóteles Sandoval, también incluía desaparecer la 380.