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Tras el iluminado retorno del beisbol profesional al estado, las sombras persiguen de nuevo a la empresa propietaria del equipo Charros de Jalisco.
La Comisión de Hacienda del congreso local, se deshizo fácilmente de la petición de Juegos y Espectáculos Beisbol Charros S.A. de C.V, al argumentar que no existen elementos jurídicos para otorgar la administración del estadio de atletismo por 50 años ya que el solicitante ni es dueño del terreno, ni tiene el contrato de comodato.
En todo caso, aclaró la comisión, tendría que formular la petición el ayuntamiento de Zapopan (dueño del predio) o el Consejo Estatal para el Fomento Deportivo, CODE (comodatario del terreno donde se levantó el estadio).
La mala estrella del equipo parece estar de la mano de su más reciente temporada. Después de su debut donde en una campaña de ensueño llegaron a la final que perdieron contra Tomateros de Culiacán, los Charros tuvieron una primera vuelta 2015-2016 con 18 ganados y 17 perdidos y una segunda vuelta con 12 ganados y 21 perdidos, por lo que no entraron a los play offs pese a que de los ocho equipos solo dos quedan eliminados.
El retorno del beisbol había sido toda una fiesta, sobre todo para los empresarios promotores del equipo. Recibieron de parte del gobierno estatal cartas compromiso ante la Liga Mexicana del Pacífico para ser aceptados tras adquirir la franquicia de los Algodoneros de Guasave.
El apoyo prometido se tradujo en la cesión primero por 90 días y luego en forma indefinida de las instalaciones del estadio de Atletismo en el cual el gobierno estatal había invertido cerca de 600 millones de pesos y que quedó inutilizado para otras prácticas deportivas.
Además, para hacer las adecuaciones al campo de juego donde se destruyó la pista de tartán, se invirtieron más de 50 millones de pesos y otros diez millones en acondicionar gradas, elevadores y pintura general.
Según el contrato de comodato entregado por el CODE a Juegos y Espectáculos Beisbol Charros S.A. de C.V., la empresa se haría cargo del mantenimiento con un costo anual de cuatro millones de pesos.
Los Charros resolvieron además el tema de los traslados. El Fideicomiso de Turismo de la Zona Metropolitana acordó en el punto siete de una sesión celebrada el 23 de abril de 2015, establecer una “alianza” con el equipo de beisbol para cubrir los gastos cada que el equipo juegue fuera de la zona metropolitana para lo cual dispusieron de dos millones 200 mil pesos.
A cambio del apoyo recibirían: promoción de imagen, comercialización del equipo en la página web del fideicomiso, ampliar noches de estadía de visitantes a otros eventos, traslado de la expo al estadio, mil 200 boletos de cortesía, publicidad y video promocional y acceso a equipos de toda la liga.
Además de los apoyos obtenidos, la empresa Juegos y Espectáculos Beisbol Charros S.A. de C.V. compitió para conseguir recursos de la Secretaría de Economía a través del Programa para el Desarrollo de la Industrial del Software (Prosoft) 2015.
En la convocatoria sancionada en el estado por el Consejo Estatal de ciencia y Tecnología (Coecytjal) y la Secretaría de Innovación, Ciencia y Tecnología, se dirigían a “las personas físicas con actividad empresarial y personas morales constituidas conforme a la legislación mexicana cuya actividad principal esté orientada a: software, servicios de TI, externalización de procesos de negocio y medios creativos digitales, delimitada como la “oferta de TI”.
Con el folio estatal 3425, la empresa propietaria de Charros recibió la calificación de proyecto “no aprobado” con todo y los 50 nuevos empleos que prometía crear.
Aunque el proyecto de software no fue especificado, tal vez tuviera relación con la pantalla de 170 metros cuadrados de leds de última generación, además del software más avanzado de la liga que costó 3.9 millones de pesos también a cargo del erario estatal.
