Sin entrar en detalles, el gobernador Enrique Alfaro informó en su momento que el proyecto de Chalacatepec ya le había generado al Instituto de Pensiones del Estado de Jalisco (Ipejal), 35 millones de dólares de “ingresos líquidos” como dividendos del fondo en el que aportó casi 89 millones de dólares.
¿Pero de qué fondo habla el gobernador? ¿Qué inversiones son las que generaron esos recursos “líquidos”? ¿Pueden los trabajadores de Pensiones tener acceso a conocer los números que acrediten ese retorno de 35 millones de dólares?
De acuerdo con el proyecto original, Ipejal aportó casi 89 millones de dólares al Fideicomiso F/380 en una sociedad con la empresa Rasa Land para un desarrollo turístico de mil 200 hectáreas en la Costalegre en el ejido José María Morelos de Tomatlán.
De la inversión, 75 millones de dólares fueron aportados por Pensiones para que la compañía radicada en Malta y Holanda y encabezada por los hermanos Juan Cristóbal y Jerónimo Bremer, comprara las mismas tierras de Chalacatepec.
Pero Ipejal cedió la mitad de su participación que era del 48.5 por ciento, a cambio de una alianza con Activos Turísticos de México, SAPI de CV (ACTUR), con los que pasó a tener apenas el 24 por ciento.
Por la cesión, supuestamente recibió 90 millones 979 mil 505 dólares, lo que arrojaría una utilidad de dos millones 29 mil 505 dólares respecto a su participación en el primer fideicomiso.
No obstante, más adelante se aclara que los más de 90 millones de dólares establecidos en la venta de derechos de Chalacatepec, son en realidad el 24.01 por ciento del valor de la sociedad y que incluye un portafolios integrado por el proyecto La Mandarina, en Nayarit y el hotel Four Seasons en la Ciudad de México.
Además, una auditoría a Pensiones por parte de la Contraloría del Estado (DGP/4349/2015), advierte que al ceder el instituto los derechos del fideicomiso F/380 de Chalacatepec en favor de Activos Turísticos de México, fue detectado que la operación fue realizada 329 millones 113 mil 225 pesos por debajo del valor de la aportación del Ipejal al fideicomiso.
Habría invertido mil 153 millones 636 mil 750 pesos y en la transacción recibió 824 millones 523 mil 525 pesos, lo que constituye un perjuicio patrimonial.
Con su nueva firma ACTUR, Pensiones participa en RLH Properties, S.A.P.I. de C.V., compañía controladora que se dedica a la adquisición y desarrollo de activos hoteleros y que cuenta con la filial RLH Properties SAPIB, que utiliza los fondos para cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores.
La controladora, invirtió 260 millones de dólares en la compra de dos hoteles en Mayakoba en la Riviera Maya, nada menos que a la polémica firma española OHL. RLH Properties, reconoce que ACTUR (donde figura Ipejal), es la principal accionista con 57.9 por ciento de participación.
Sin haberse construido un solo metro cuadrado del proyecto de Chalacatepec que ahora se llama “Xala”, ¿de dónde vienen los 35 millones de dólares de ingresos líquidos?
¿De la Bolsa de Valores? ¿De las inversiones en hoteles? ¿De la especulación sobre el valor de las tierras? Y sobre todo: ¿Qué día ingresaron a las arcas del Ipejal esos recursos? ¿Cuántas medicinas se pueden adquirir para los pensionados?