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No hay nada más denigrante y humillante que el trato que se ha dado en México a los trabajadores de la salud; hombres y mujeres que durante ya más de un año han puesto por delante el compromiso con su profesión y que han sido leales al juramento hipocrático para salvar vidas aún a costa de la propia, sacrificando familia, amigos, y diversión, y que a cambio han recibido un trato indigno.
Es difícil no sentir un gran malestar cuando los vemos mendingando vacunas. Justo ellos, que se han partido el lomo cada día a lo largo de la pandemia, que han trabajado horas extras, que tienen su rostro marcado por las largas jornadas usando protectores para evitar ser contagiados. Ellos, que han llorado por impotencia al ver morir a tantos pacientes. Ellos, que han tenido que entubar a sus amigos y compañeros que se infectaron porque al igual que ellos respondieron valientemente cuando el deber se impuso a cualquier acto de reflexión. Ellos, que los han visto perder su último aliento sin oportunidad de hacer algo más para prolongarles la vida.
Nadie en el marco de la pandemia merece más una vacuna contra la COVID-19 que estos personajes que buscando salvar vidas han puesto en predicamento la suya.
No hay que olvidar que al inicio de la pandemia fueron rechazados, discriminados, que sufrieron desprecio de vecinos, de la gente en las calles que los llegó a rociar con cloro, que les destruyeron artículos de su propiedad, y fueron maltratados incluso en su integridad física.
Tampoco se puede olvidar que se les entregaron artículos de baja y nula calidad para protegerse y fue razón para que muchos resultaran infectados.
Una injusticia de Grandes dimensiones.
Las vacunas aún en el sector público les han llegado a cuentagotas y son pocos los trabajadores de la salud que han alcanzado ya las dos dosis.
Y ni qué hablar de los trabajadores del sector privado, a quienes de plano se les ha relegado y negado la vacunación por ese simple hecho, dando por sentado que obtienen mejores sueldos y por ello pueden comprar sus propios biológicos, como si estos estuviesen a la venta para que los pudiesen adquirir.
No se entiende la negativa a inocularlos y resulta inconcebible el rechazo en la Cámara de Senadores a la iniciativa que propone vacunar de inmediato a todos los médicos del país sin importar su lugar de trabajo.
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) arrojó en su más reciente informe sobre casos de Covid-19 que en México han muerto casi 3 mil trabajadores de la salud.
Expertos como los doctores Alejandro Macías y Carlos del Río compartieron en redes sociales la más reciente actualización de este reporte, el cual fue publicado en la página del organismo el pasado 9 de febrero.
En el documento hay diversos apartados en los que se aprecia la forma en que la pandemia ha alcanzado distintos países de América; sin embargo, su sexto apartado está dedicado a cómo la infección por SARS-CoV-2 ha afectado la salud del sector.
Algunos de los puntos que se destacaron en el reporte fueron que los empleados que se contagiaron pertenecían a distintos roles y departamentos, además que no hubo una diferencia constante en el riesgo de infección entre los puestos de trabajo.
La información reunida de 18 países abarca desde enero de 2020 hasta el 8 de febrero de 2021, tiempo en el cual se reportaron, entre el personal de salud, un total de un millón 315 mil 880 casos positivos de Covid-19 y 6 mil 645 muertes debido a la enfermedad.
En el informe desglosaron la información de muertes en los países y el que registró una mayor cantidad de muertes entre los trabajadores de la salud fue México, con un total de 2 mil 996 decesos. Le siguen Estados Unidos, con mil 347; Perú, con 589; Brasil, con 480; y Argentina, con 446.
La última lista afirmaba que en México ya eran más de tres mil y en muchos casos los contagios se dieron dentro de los nosocomios por realizar sus labores profesionales.
Ante esta situación una de las promesas iniciales del gobierno federal fue ofrecer una prioridad al personal médico para recibir primero la vacuna. Al menos al comienzo así fue pero conforme han pasado las semanas se ha perdido este beneficio.
También ha existido una exclusión para permitir que los doctores reciban la inmunización de Pfizer que se les prometió. Hasta ahora solo los que laboran en áreas Covid-19 de hospitales públicos han recibido al menos una dosis. Mientras que los de otras secciones permanecen desprotegidos. En tanto que los que laboran en el sector privado o en farmacias han sido ignorados por completo.
Por todo lo mencionado la senadora Lilly Téllez presentó una iniciativa para que se vacune de inmediato a todo el personal médico del país sin importar su lugar de trabajo. La propuesta hace hincapié en que se debe inocular primero a los elementos de este sector antes que a los trabajadores del campo educativo como maestros.
La legisladora comenta que todos los homenajes y medallas que se han entregado a los galenos están bien pero en estos momentos la mayor recompensa que se les puede hacer es vacunarlos. Señala que no es un capricho sino simplemente una medida básica y elemental para su protección por el riesgo que enfrentan todos los días.
Pero, pese a todo lo mencionado, la Mesa Directiva del Senado de la República, ha rechazado la propuesta.
Sin ofrecer una explicación la mayoría de los políticos votaron en contra de esta iniciativa. Por lo tanto no habrá cambios en la actual estrategia de vacunación.
Mientras que a la fecha se estima que uno de cada cuatro trabajadores de la salud en el país no ha recibido el biológico de Pfizer o de cualquier otra farmacéutica. Eso ha llevado a la creación de iniciativas como Vacunas Médicos MX para lograr ser escuchados por las autoridades.
En este sitio, se menciona que, hasta este momento se contabilizan 271 mil 231 médicos en el país que no han recibido al menos una dosis de la vacuna. La cifra equivale al 24.6 por ciento del total del personal médico mexicano.
De igual forma, se subraya existen claras diferencias dentro del gremio. Los que han recibido la mayoría de las dosis son quienes trabajan en áreas Covid-19 de hospitales públicos. Mientras que para nosocomios privados apenas se han destinado cantidades mínimas de biológicos. En tanto que hasta la fecha ninguno de los doctores que laboran en consultorios de farmacias ha recibido al menos una dosis.
Vacunas Médico MX, es una iniciativa de médicos mexicanos con el único objetivo de conseguir una vacunación completa e inmediata contra la Covid-19 para todos los integrantes del sector de salud.
Como parte de la estrategia se habilitó un portal en el que todos los médicos y demás trabajadores de la salud que todavía no han sido inmunizados se deben registrar. Lo único que necesitan es proporcionar sus datos básicos como nombre, edad, cédula profesional, estado y especialidad en caso de contar con una.
Lo que se plantea es ofrecer la información reunida a las autoridades federales para conseguir la aplicación de la vacuna. Hasta este momento ya se han registrado más de 21 mil médicos y eso muestra la enorme cantidad de personas a las que se les prometió prioridad y no se les ha cumplido.
Por otra parte, la propia plataforma muestra que la mayoría de quienes han participado en el sondeo tienen menos de 40 años. De esta forma, se trata de un grupo que deberá esperar varios meses para poder ser inoculado si se espera hasta cumplir con el criterio de edad.
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